Lo que calla la concejala de fiestas en sus valoraciones sobre las fiestas son los “errores de bulto” y la descoordinación y los despropósitos en la organización de algunos actos

Las fiestas han sido una muestra más de la improvisación y ausencia de compromiso del equipo de gobierno

Petrer, 16 de octubre, 2015 –  Han pasado las fiestas y hemos escuchado con atención el balance que el equipo de gobierno hace a través de su concejala de fiestas. El análisis de la concejala es simplemente deprimente y falso, para ella todo ha estado “muy bien” y todo ha sido perfecto. Sin embargo, tenemos que decir que “o la concejala tiene un concepto equivocado de la perfección o ha estado en otra fiesta”.
Sin entrar en el detalle de lo publicado en un medio local sobre los incidentes violentos del pasado fin de  semana de fiestas, queremos comentar algunos “errores de bulto” en la organización de algunos actos, fruto de la poca implicación del equipo de gobierno, y de la improvisación en la organización de los mismos.
Hablando de desconcierto, decir que nos parece un auténtico despropósito, y una total descoordinación, que se programen dos actividades musicales el mismo día, a la misma hora y para el mismo público. Nadie entiende, y especialmente algunos grupos locales, que el 25 de septiembre y a la misma hora que estaban programados los Conciertos de los Grupos Locales en el parque 9 de octubre, se hiciera otra actividad musical en el aparcamiento del campo de fútbol.
Todavía se entiende menos que durante el concierto realizado por la Unión Musical y el Coro del CEAM, en la conmemoración del día de la Comunidad Valenciana, en el parque del Campet, estuviera la música de los hinchables, del “tren habanero” y del toro mecánico al mismo tiempo y en el mismo lugar que se estaba interpretando el concierto, impidiendo que músicos y coro, después de muchos ensayos y horas de trabajo previo, pudieran concentrarse en su interpretación, los músicos y el coro se merecen un respeto.
La noche del 5 de octubre en un alarde de improvisación y ausencia de responsabilidad, se tiró una “palmera de fuegos artificiales” desde la torre de la iglesia, sin que los bomberos, ni la policía tuvieran conocimiento del acto según nuestras informaciones. La fortuna quiso que todo se desarrollara con aparente normalidad, pero los protocolos de seguridad exigen en este tipo de actos de fuego que al menos se marque un perímetro de seguridad, y se notifique y haya presencia de una dotación de bomberos y policía local.
Tampoco en la organización del pasacalle del día 5 de octubre “nanos i xegants”, se le prestó demasiada atención al recorrido y a la seguridad, ya que siendo un acto donde niños/as, familiares con carritos y público en general acuden de manera multitudinaria, no se tuvo la precaución, como en años anteriores, de quitar los coches aparcados del itinerario.
La escasa publicidad para la Verbena Popular del día 6 de octubre y la ausencia de implicación del equipo de gobierno fue la causa del fracaso en la poca afluencia de público a la misma.
Una muestra más de la improvisación de este equipo de gobierno fue el mercado  medieval, que además de la desafortunada decisión de quitar las actividades con animales, de que los niños no pudieran subir en los burritos o ver los animales de granja,   se aprobó en junta de gobierno una semana antes de su realización, esto provocó  que no se pudiera hacer publicidad,  que los mercaderes locales no pudieran programarse para participar en el mercado, la poquísima afluencia de publico y el lógico disgusto de mercaderes y artesanos, que se vieron perjudicados.
A todo esto hay que añadir que nos hemos enterando de los actos de fiestas por la prensa, o sea que de transparencia cero.
Nada de esto ha dicho la concejala, o bien no ha estado en la fiesta o la perfección es otra cosa. Le pedimos a la concejal un poco menos de autocomplacencia y más implicación.